¡Brindemos con cerveza!

¡Buenas cervecer@s! Hoy os traigo una experiencia personal que quiero convertir en recomendación para todos aquellos a los que, como a mí, os molen más los brindis con cerveza que con la típica copa de Cava o Champagne durante estas fiestas, sobre todo la que todos nos tomamos después de las uvas. Y es que, sin despreciar a esas variedades de vino, muchos me entenderán cuando antepongo mis preferencias cerveceras a esas finas copas de espumoso para compartir los momentos de alegría con mi gente degustando mi bebida favorita.

Ya hace unos años que, precisamente para el brindis de después de las uvas, vengo seleccionando alguna birra concreta para tener preparada para el momento. Y como siempre digo, las posibilidades de elección son infinitas. Te presento algunos estilos de cerveza que he ido eligiendo yo durante las últimas Nocheviejas como mi primera bebida del año y te comento un poco de ellos, así, si te animas, te buscas la que más te apetezca y te unes a mi tradición. Verás que hay variedad para todos los gustos.

• Berliner Weisse: Ya las bautizó Napoleón como el Champagne del Norte. Y es que ambas bebidas guardan ciertas similitudes, puesto que se trata de cervezas con mucho gas y con un característico sabor ácido. Estos aportes hacen de las Berliner Weisse unas cervezas muy refrescantes, lo que unido a su baja graduación (rondan el 3% de alcohol), las convierte en la bebida perfecta para tomar en las terrazas de Berlín, su lugar de origen, cuando hace buen tiempo. Y, por qué no, para sustituir un buen espumoso para brindar con nuestros seres queridos.
• Belgian IPA: Lo mejor del mundo IPA con las características propias de las mejores Ale Belgas. Son cervezas con más complejidad, de aromas y sabores afrutados y especiados y con un buen equilibrio entre el amargor y el dulzor. Con un aporte de alcohol ya un poco más alto, siguen siendo perfectas para un buen brindis. Riquísimas e idóneas para compartir.
• Dry Stout: Un seguro para los amantes de la cerveza negra. Su textura sedosa es una de sus claves, una gran elección para empezar el año con suavidad. Aromas a café y cacao y un sabor con final amargo y prolongado pero no por ello excesivamente alcohólicas, geniales para tomar a trago largo y brindar en vasos de pinta como en los más míticos pubs irlandeses. Y muy válidas también para nuestra fiesta de Nochevieja.
• Lambic de frutas: Quizá una de mis favoritas para estas fechas. El sabor ácido de las cervezas de fermentación espontánea con el toque afrutado de la frambuesa, la cereza o la fruta que forme parte de su elaboración. Son cervezas muy complejas por el aporte que le confiere su envejecimiento durante meses (y a veces años) en barricas, pero muy fáciles de beber y estupendas para brindar. Incluso su formato, pues es común verlas en botellas de 75 centilitros, invita a compartirlas con nuestros familiares y amigos.
• Barley Wine: Para los que prefieran brindar con un licor en lugar de vino espumoso esta puede ser una de las mejores sustitutas. Son cervezas de alta intensidad de sabor, licorosas y dulces. Suelen superar el 10% de alcohol, por lo que son para tomar más poco a poco, degustando el brindis con pausa y relajación para asentar la cena y la fiesta.

Y, como siempre, hay muchos más ejemplos. Anímate a probar con alguno de estos o con alguna que se te ocurra a ti. Al fin y al cabo, tu bebida favorita no puede ser mala para brindar y comenzar el año con sabor y felicidad líquida. ¡Salud!

Pablo, Beer Sommelier